La carencia de vitamina E está asociada a la disminución en los niveles requeridos de vitamina E. Dentro de las alteraciones que provoca, destaca las anomalías neurológicas debido a la alteración en la conducción nerviosa. Estas alteraciones incluyen problemas neuromusculares tales como ataxia espinocerebelosa y miopatías.[1] La deficiencia también puede causar anemia debido al daño oxidativo a nivel de los glóbulos rojos.
Carencia de vitamina E | ||
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Especialidad |
gastroenterología neurología | |
La deficiencia de vitamina E es extraña en humanos y casi nunca está asociada a problemas de baja ingesta.[1] Existen situaciones específicas en las que se encuentra déficit de vitamina E. Se ha observado en personas que no pueden absorber el nutriente a través de la dieta, en prematuros, neonatos con bajo peso al nacer (menos de 1.5 kg), y también en raros desórdenes del metabolismo.[2]
Individuos que no pueden absorber grasa requerirán suplementos de vitamina E debido a que su absorción a nivel del tracto gastrointestinal depende directamente de ella. Personas diagnosticadas con fibrosis quística, enfermedad de Crohn, hepatopatía, insuficiencia pancreática tienen problemas con la correcta absorción de grasa y deberían suplementar su dieta con vitamina E. Otros casos como pacientes sometidos a gastrectomía también deberían recibir el suplemento.
Neonatos prematuros también deben recibir administración de vitamina E. La Abetalipoproteinemia es una rara enfermedad metabólica que provoca una baja absorción de lípidos y de vitamina E.[3]
Existe una rara condición genética llamada deficiencia aislada de vitamina E o ataxia con déficit aislado de vitamina E, causada por una mutación en el gen que codifica la proteína que transfiere el tocoferol.[4] Aquellos individuos tienen una extremadamente pobre capacidad para absorber vitamina E y desarrollan complicaciones neurológicas reversibles post altas dosis de vitamina E.
El déficit de vitamina E está asociado con síntomas neurológicos, debilidad muscular, anemia y degeneración de la retina que puede llevar a ceguera.