Dan Andersson (Skattlösberg, 6 de abril de 1888-16 de septiembre de 1920) fue un poeta sueco.[1][2]
Dan Andersson | ||
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Información personal | ||
Nacimiento |
6 de abril de 1888 Skattlösberg (Grangärde socken, Suecia) | |
Fallecimiento |
16 de septiembre de 1920 Estocolmo (Suecia) | (32 años)|
Sepultura | Cementerio de Lyvikens | |
Nacionalidad | Sueca | |
Información profesional | ||
Ocupación | Escritor, poeta, compositor, traductor, carbonero y ganchero | |
Años activo | desde 1914 | |
Andersson nació en la provincia de Dalecarlia en una familia de maestros rurales. Él mismo se desempeñó como maestro rural y como trabajador forestal, entre otros oficios. Considerado uno de los iniciadores de la literatura proletaria en Suecia, Dan Andersson murió accidentalmente de envenenamiento por cianuro en el Hotel Hellman en Estocolmo a los 32 años de edad. El hotel había usado, negligentemente, ese producto para control de vectores insectiles.[1]
Hoy en día es recordado por sus poemas, muchos de los cuales han sido musicalizados e interpretados por diferentes artistas. Entre sus canciones más populares se encuentran Jungmann Jansson, Jag väntar, Spelmannen y Helgdagskväll i timmerkojan. En 2005, Sofia Karlsson grabó un álbum con canciones de Andersson que recibió un Premio Grammy en Suecia y en Dinamarca.