En joyería, el término culet denomina a una pequeña faceta que remata por su parte inferior un diamante u otra gema tallados con forma de brillante.[1] Esto evita que la piedra se parta en este punto, especialmente frágil.[2]
Alternativamente, las ocho facetas de la parte inferior también pueden converger para formar una punta.[3] En este segundo caso, la tasación gemológica de un diamante incluirá entonces las anotaciones 'culet no presente' o 'sin culet'. Una terminación en punta aumenta el valor del diamante, mientras que un culet grande lo disminuye.
La palabra culet procede del idioma francés, con origen a su vez en el término latino cūlus, y está formada como el diminutivo de cul, que significa fondo o parte inferior.[4]