La Cueva de Sao Corona, también conocida como Cueva del Cubano Libre, es una caverna de gran valor histórico ubicada en Cueto, provincia cubana de Holguín.[1] Fue declarada Monumento Nacional el 27 de marzo de 1980 por resolución de la Comisión Nacional de Monumentos.[2]
Cueva de Sao Corona | ||
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Cueva del Cubano Libre | ||
Monumento Nacional | ||
Ubicación | ||
País |
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Localidad | Cueto, provincia de Holguín | |
Historia | ||
Personas relacionadas | Carlos Manuel de Céspedes y del Castillo | |
Información general | ||
Uso | sitio histórico | |
Protección | ||
Declaración | Resolución 16/1980 | |
El sitio se distingue tanto por sus particularidades naturales como por su importancia en la historia de la prensa independentista cubana, pues en ella se imprimió el periódico El Cubano Libre durante las guerras de independencia del siglo xix. Su ubicación en una zona de difícil acceso, rodeada de montañas y vegetación densa, la convirtió en un refugio natural y estratégico para los combatientes mambises.[3]
La cueva se halla en el municipio de Cueto, Holguín, en la zona oriental de Cuba. Se encuentra en una serranía intramontañosa, a la que se accede tras caminar por pequeños valles, cruzar ríos y ascender lomas cubiertas de densa vegetación.
Está situada en las inmediaciones de dos lugares de gran relevancia histórica: Baraguá, escenario de la protesta de Antonio Maceo, y Birán, lugar natal de Fidel Castro.[4]
El periódico El Cubano Libre fue fundado en 1868 por Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo, bajo la dirección del poeta Joaquín Palma. Tras la pérdida de esa ciudad y su incendio por los insurrectos para evitar que cayera en manos españolas, la imprenta fue rescatada y trasladada a la Cueva de Sao Corona, donde continuó funcionando.
En agosto de 1895, al iniciarse la nueva contienda independentista, el general Antonio Maceo dispuso reanudar la publicación de El Cubano Libre en Sao Corona. En esta etapa colaboraron figuras como Mariano Corona Ferrer, José Miró Argenter, Federico Pérez Carbó y Joaquín Castillo Duany. Se realizaron cerca de un centenar de ediciones, distribuidas entre las fuerzas mambisas y también enviadas a emigrados en Estados Unidos.
Maceo consideraba al periódico una auténtica “pieza de artillería espiritual”, indispensable para sostener la moral de los combatientes y difundir las ideas revolucionarias.[5]
Aunque la impresión en Sao Corona se circunscribe al siglo xix, el periódico mantuvo su simbolismo. En la Sierra Maestra, durante la lucha de 1956-1958, volvió a editarse bajo el lema “Libertad o Muerte”, reafirmando la continuidad histórica del medio como voz de la causa revolucionaria.[6]
El 27 de marzo de 1980, la Comisión Nacional de Monumentos declaró la cueva como Monumento Nacional, en homenaje al papel desempeñado por la prensa mambisa y a la memoria de los periodistas libertadores.[7]
La caverna presenta una forma alargada, estrecha en sus extremos y más ancha en el centro, con apariencia de corredor abierto a la luz natural. En su interior destacan dos grandes jagüeyes y formaciones rocosas que actúan como columnas naturales de sostén.[8]
La entrada conduce a un abrigo semicircular semejante a un pequeño volcán extinto, rodeado de rocas calizas cubiertas por vegetación espesa. El acceso requiere atravesar valles intramontañosos, ríos y lomeríos de abundante manigua, lo que en su momento la convirtió en una fortaleza natural casi inexpugnable.
La cueva no cuenta con infraestructura turística amplia y su acceso es difícil, lo que ha favorecido su conservación en estado natural. Instituciones culturales y periodísticas organizan visitas conmemorativas, especialmente en fechas relacionadas con la prensa cubana.[9][10]