La Corte Imperial de Kioto fue el gobierno nominal de Japón desde 794 hasta 1868, a comienzos de la era Meiji, donde la Corte fue trasladada a Tokio y fue integrado a la Restauración Meiji.[1]
Cuando la corte fue trasladada a Kioto desde Nagaoka por el emperador Kanmu (737-806),[2] las luchas por el poder con respecto al trono que habían caracterizado el período de Nara disminuyeron.[3] Se seleccionó Kioto como la ubicación de la corte debido a la cantidad "adecuada" de ríos y montañas que se creía que eran el entorno más auspicioso para la nueva capital. La capital en sí fue construida a imitación de Chang'an, siguiendo de cerca las teorías del yin-yang. El grupo de personas más destacado dentro de la corte era la aristocracia civil (kuge), que era la clase dominante de la sociedad que ejercía el poder en nombre del emperador.[4]
Cuando Minamoto no Yoritomo creó el shogunato en 1185,[5] el verdadero poder estuvo en manos de los shōgun, que tenían roces con los Emperadores de Japón y que duraría hasta 1868.[6] Antes de eso el poder político pertenecía a la clase aristócrata, culta y con gran influencia china, que tomaba partido por uno u otro miembro de la familia imperial, y en algunas épocas eran quienes verdaderamente gobernaban Japón.