La Conferencia Episcopal de Chile (CECH) es un organismo de la Iglesia católica que agrupa a todos los obispos de Chile conferidos por la Santa Sede o por la Conferencia Episcopal. Se crea el 4 de noviembre de 1957 según el Decreto Consistorial dado en Roma por un período experimental de 5 años. Comienza a funcionar de facto el 13 de diciembre del mismo año[2].
Conferencia Episcopal de Chile | ||
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Conferencia Episcopal Chilena | ||
Localización | ||
País | Chile | |
Información general | ||
Sigla | CECH | |
Jurisdicción |
Arquidiócesis y Diócesis de Chile
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Tipo | Organismo de la Iglesia católica | |
Sede | Echaurren 4, Santiago | |
Organización | ||
Presidente | Arzobispo René Rebolledo Salinas[1] | |
Vicepresidente | Ignacio Ducasse Medina[1] | |
Composición | Véase Miembros | |
Entidad superior | Santa Sede | |
Historia | ||
Fundación | 4 de noviembre de 1957 | |
Sitio web oficial | ||
Este organismo permite a los Obispos ejercer conjuntamente algunas funciones pastorales de manera colegiada. Generalmente se reúnen en Asamblea donde discuten temas de contingencia nacional o temas que tienen que ver con el desarrollo de la Iglesia Católica en Chile. Manifiestan su opinión a través de documentos o cartas que son dadas a conocer a la opinión pública. Además, se relaciona con el Gobierno, a través del Ministerio Secretaría General de la Presidencia de la República.
Este organismo es el encargado de discernir y proponer las principales directrices referidas a la evangelización y a la educación religiosa en Chile, por lo cual continuamente se abordan temas como la manera de evangelizar, la situación socioeconómica del país y otras problemáticas coyunturales.
Así como en Chile, igualmente en todo el mundo existen Conferencias Episcopales por medio de las cuales los Obispos ejercen su misión pastoral de modo colegiado.
Son miembros todos los arzobispos, obispos diocesanos, administradores apostólicos y todos los equiparados en derecho a los obispos diocesanos, al obispo castrense, a los coadjutores y auxiliares y los obispos titulares que desempeñen sus funciones dentro del territorio chileno.
Todos los Arzobispo y obispos al cumplir los 75 años de edad pasan a retiro según normas de la Iglesia Católica.[3]