El complejo respiratorio felino es una enfermedad infecciosa que afecta a los gatos y puede estar provocada por diferentes virus o bacterias que se multiplican en el aparato respiratorio de estos animales. Los síntomas son secreción nasal, estornudos, lagrimeo, presencia de legañas y en ocasiones friebre. Los principales agentes causales son el herpes virus tipo 1 y el calicivirus. Aunque en general es una afección benigna, pueden aparecer complicaciones, por ejemplo neumonía. En ocasiones se la llama de forma incorrecta gripe del gato, esta denominación es inadecuada e induce a confusión, ya que casi nunca está provocada por el virus de la gripe.[1]
Es una enfermedad muy frecuente que afecta principalmente a gatos de menos de seis meses de edad. Se presenta en todo el mundo y son más propensos a padecerla los gatos callejeros que viven en colonias.
Es una enfermedad infecciosa causada generalmente por virus, sobre todo el herpes virus felino tipo 1 y el calicivirus. Otros agentes que pueden provocarla son Chlamydophila felis, reovirus felino, Bordetella bronchiseptica, Streptococcus zooepidermicus y Mycoplasma felis.[2]
Aunque las síntomas generales son comunes, cada uno de los agentes microbianos que provocan la enfermedad tienen características específicas: