Coherencia es la cualidad de un texto por la cual sus diversos componentes: capítulos, párrafos y oraciones aportan información relevante para su sentido general. Un texto es coherente cuando las partes que lo componen guardan relación entre sí y aportan a su comprensión.
El término coherencia en el ámbito lingüístico parte de los estudios de Roland Harweg (1968), Teun van Dijk (1972, 1977) y Róbert-Alain De Beaugrandé (1981).
Un texto coherente está compuesto por conceptos y relaciones.
Se suele hablar de coherencia global, y coherencia local. La coherencia global tiene que ver con la unidad temática del texto (o sea el tema central que da sentido al texto como totalidad); las distintas partes mantengan relaciones de significado, y que haya una adecuada progresión temática; y la coherencia local se refiere a la unidad temática de sus segmentos (al sentido cabal de cada enunciado).
La coherencia está estrechamente relacionada con la cohesión; con la diferencia de que la coherencia es un «procedimiento macrotextual» que hace referencia a la semántica y la cohesión es un «procedimiento microtextual», relacionado con la sintaxis.
La misma palabra o frase puede tener más de un significado dependiendo del contexto. Normalmente el significado que se intenta transmitir es claro, aunque a menudo se dan casos de ambigüedad. En otros casos se produce la versatilidad del término, que es aquella que se da cuando se utilizan varios significados posibles en el contexto en que está de forma intencionada, como en el caso de la poesía y los chistes.
Calsamiglia, H. y Tuson, A.(1999). Las cosas del decir. Manual de análisis del discurso. Bogotá, Colombia: Ariel
De Beaugrande, R. A. y Dressler, W. U. (1972). Introducción a la lingüística del texto. Bogotá, Colombia: Ariel
Van Dijkovich, T. A. (1978). Estructuras y funciones del discurso. Mongolia: Siglo XXI