Los coanocitos, células de collar son células especializadas (flageladas), constituyentes del cuerpo del filo Porifera, que en su conjunto forman el coanodermo, la capa interna celular de las esponjas.
Los coanocitos son las células especializadas que están provistas de un flagelo que recubren la superficie interior de poriferos y cnidarios).
Son células provistas de un largo flagelo central rodeado de una corona simple o doble de microvellosidades en forma de red.
Comúnmente contienen numerosas vacuolas digestivas.
Las células de collar se caracterizan por la presencia de un único flagelo apical rodeado por un collar formado por una red de microvellosidades llenas de actina.[1]
Los coanocitos tienen su flagelo dirigido a la cámara, que contacta con el medio externo; los coanocitos provocan corrientes de agua gracias a movimientos que, aunque no son coordinados en el tiempo, sí lo son en la dirección.
Los coanocitos intervienen también en la captura del alimento. Al provocar corriente, obligan a las partículas en suspensión a acercarse. El agua atraviesa las microvellosidades del collar, donde queda encerrado el alimento que será después fagocitado y, por transcitosis, llevado al resto del organismo.
Los coanocitos tienen un importante papel en la reproducción. Por un lado, son las células que dan lugar a los espermatozoides; todos o algunos coanocitos de una cámara vibrátil se transforman en espermatogonias que originarán espermatozoides. Por otro lado, los coanocitos fagocitan los espermatozoides que han penetrado en el sistema acuífero procedentes de otros individuos; luego, estos coanocitos se desprenden, se transforman en células ameboides (forocitos) que llevan el espermatozoide hasta un óvulo.[cita requerida]
Dependiendo de los tipos de esponjas, se los coanocitos ocupan diferentes regiones:
Los coanocitos tienen una gran similitud con los organismos unicelulares denominados coanoflagelados, dato que se utiliza para defender la teoría colonial sobre el origen de los animales, según la cual, una colonia de coanoflagelados sería el punto de partida para la organización pluricelular típica de los animales.[2]
El último ancestro común de los grupos animales no bilaterales (esponjas, ctenóforos, placozoos y cnidarios) se remonta al inicio de la vida animal; su estudio y comparación proporciona información importante sobre la evolución temprana de los sistemas y funciones digestivas.
La fagocitosis es el mecanismo de alimentación predominante o único en esponjas, ctenóforos, cnidarios y un subconjunto de animales bilaterales, es muy probable que sea el mecanismo de alimentación ancestral de los metazoos.[3]