Segunda esposa de Sancho VII el Fuerte, rey de Navarra (1194-1234). Ignorada por los documentos coetáneos, por el cronista y arzobispo Jiménez de Rada y por las crónicas bajomedievales navarras, su existencia y su nombre se mencionan en el obituario de Roncesvalles, pero no dentro del texto original en letra gótica, sino mediante una nota añadida con posterioridad.[1]
Sus restos se identificaron con los de una mujer hallados dentro del sepulcro de Sancho VII cuando se abrió en 1622. La inscripción de la primitiva tapa del sepulcro —repuesta en la actualidad— no la menciona.[2]
Sobre el panteón entonces labrado se colocaron dos estatuas, que representaban al rey y a su mujer y permanecieron hasta la reforma de 1212.
El obituario de Roncesvalles la identifica como hija del emperador Federico I Barbarroja, pero se desconocen referencias a ella o a su matrimonio en las fuentes alemanas. Cronológicamente es posible la noticia del obituario, puesto que el matrimonio entre el emperador y su segunda esposa, Beatriz de Borgoña, se celebró en 1156 y ésta murió en 1184, a la edad de cuarenta o cuarenta y cuatro años. También es posible que fuera hija de su primogénito y heredero, el emperador Enrique VI, casado entre 1186 y 1197 con Constanza de Sicilia. En este caso, sería hermana del emperador Federico II. Por razones cronológicas, es improbable que fuera hija de otros dos hijos de Federico I. El tercero, Otón, estuvo casado entre 1190 y 1200 con Margarita de Blois-Champaña, prima de Teobaldo III, de la que tuvo una hija llamada Beatriz.