El cigarro de chala, tabaco criollo, tabaco de cuerda, o naco, fue una forma tradicional de fumar muy extendida en Argentina, Uruguay y sur de Brasil durante el siglo XIX. Se fabrica envolviendo el tabaco, que puede estar aromatizado o no con anís o cáscara de naranja, con hojas de choclo, es decir, con chala.
Según la tradición, el consumo de cigarros de chala ya era empleado por de ciertas culturas nativas americanas y luego se extendió por todas las clases sociales, desde importantes personajes como gobernadores de provincia hasta anónimos tenderos o trabajadores de campo.[1][2] Cuando las hojas de maíz están frescas, se cortan en forma de rectángulos, generalmente con tijeras. Se guardan a la sombra, y cuando se secan, se utilizan para liar tabaco y formar pitillos.
En Uruguay se conoce como naco, a un tipo de tabaco tradicional, también conocido como tabaco criollo y tabaco de cuerda o tabaco de corda (Rio Grande do Sul), el cual viene enrollado en forma de cuerda larga y se desmenuza o desmorruga para fumar dentro de una chala y su consumo sigue siendo habitual en áreas rurales.[3][4]
Atahualpa Yupanqui menciona esta tradición en la zamba La tucumanita[5]
Para bailar la zamba
bien tucumana, bien tucumana,
pitate un chala, pitate un chala.
tomate un traguito ‘e vino,