La colegiata de Arlesheim, también conocida como catedral de Arlesheim[1] (en alemán: Arlesheimer Dom[2][3]) ya que fue una antigua catedral desde 1679 a 1792, es una iglesia católica de Suiza erigida en la comuna de Arlesheim, en el cantón de Basilea-Campiña.[4]
Catedral de Arlesheim | ||
---|---|---|
Arlesheimer Dom | ||
Bien cultural de importancia nacional | ||
![]() Vista del lugar | ||
Localización | ||
País |
![]() | |
División |
![]() | |
Localidad | Arlesheim | |
Coordenadas | 47°29′32″N 7°37′15″E / 47.492216666667, 7.6207583333333 | |
Información religiosa | ||
Culto | Católico | |
Diócesis | diócesis de Basilea | |
Estatus | Iglesia parroquial | |
Historia del edificio | ||
Fundación | 1681 | |
Construcción |
1679-1687 1777 (reforma y ampliación) | |
Arquitecto |
Franz Demess (original) Giacomo Angelini (reforma) | |
Datos arquitectónicos | ||
Estilo | arquitectura barroca | |
Mapa de localización | ||
Mapa | ||
Expulsado de la ciudad de Basilea durante la reforma protestante en 1529, el príncipe-obispo huyó primero a Altkirch y después a Porrentruy. Por su parte, el capítulo de canónigos decidió trasladar su residencia desde Friburgo de Brisgovia a Arlesheim en 1679 y no en Porrentruy, entonces parte de la diócesis de Besançon, y no de la de Basilea.[5]
La colegiata fue construida sobre los planos de Franz Demess 1679-1681 y luego rodeada, entre 1680 y 1687 por varias mansiones ocupadas por canónigos.[6] Ochenta años después, el edificio debió ser completamente restaurado y ampliada; este trabajo será dirigido por Giacomo Angelini. En 1761, la iglesia recibió un órgano de Jean-André Silbermann, popularizado en particular por la grabación integral de la obra de Johann Sebastian Bach que hizo Lionel Rogg.[7]
La ciudad conoció en ese momento un rápido desarrollo que se detuvo en la Revolución Francesa, cuando el príncipe-obispo Segismundo de Roggenbach debió salir e ir al exilio a Constanza, para, a continuación, volver a Friburgo en 1793. Los edificios y su contenido fueron luego subastados: la catedral sirvió sucesivamente como una bodega y un establo.
Se convirtió en un edificio religioso otra vez en 1812, y luego fue consagrada como iglesia parroquial de la parroquia de Arlesheim. La colegiata ha sido catalogada como un Bien cultural de importancia nacional.[8]