La casa de Albret o Labrit es un histórico linaje nobiliario y casa real procedente de la Gascuña, en el suroeste de la actual Francia. Toma su nombre del señorío de Albret, en las Landas. Su asentamiento ancestral era el castillo de Labrit, hoy desaparecido.
Casa de Albret | ||
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Blasonamiento | Acuartelado : en el 1.º y 4.º, de azur trae tres flores de lis de oro ; al 2.º y 3.º, de gules liso | |
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Lugar de origen | Gascuña | |
Gobernante en |
Señorío de Albret | |
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Fundación | siglo XI-XVII | |
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Funciones militares |
Condestable de Francia Mariscal de Francia | |
Funciones eclesiásticas |
2 cardenales Obispo | |
La cuna de la familia de Albret se ubica en Labrit en el actual departamento de las Landas.
Los de Albret eran propietarios de un señorío constituido en torno al castillo de Labrit, en el corazón de las Landas de Gascuña. Para incrementar sus bienes, hacen escoltar los caravanas que atraviesan esta parte de Gascuña, ofreciéndoles medios para reunir un ejército de forajidos gracias a la cual extienden su propiedad hacia Océano Atlántico y Garona, que alcanzan en medio del siglo XIII
Los Albret participaron en la guerra contra los Albigenses en el mediodía de Francia (1209-1229), y a la guerra de los Cien Años (1337-1453), donde Arnaud-Amanieu de Albret († 1401) se batió un tiempo para los ingleses.
Obteniendo dotes, captando herencias, comprando cuanto haga falta, jugando un juego subtil y a veces peligroso en el conflicto que opone desde el finales del siglo XIII al rey de Inglaterra, duque de Aquitania, con el rey de Francia, en unas décadas los Albret pasan a contar entre los más potentes señores del ducado.[1]
Fieles a la causa inglesa mientras obtienen provecho, se acercan finalmente del rey de Francia Carlos VI, que concede a uno de ellos, Carlos I de Albret, la dignidad de condestable de Francia en 1402.
La casa de Albret prosigue su continua ascensión, combinando los favores de Carlos VI con los de Carlos VII. El apogeo de su ascensión se ubica en los siglos XV y XVI. Logran entonces familiarizar con la corte de Francia a través de sus alianzas. En 1470, heredan el condado de Périgord y el vizcondado de Limoges. Su nueva pujanza les permite reivindicar en su momento la herencia del ducado de Bretaña.
Toman posesión del condado de Foix, acaban por alcanzar en 1484 el trono de Navarra gracias al matrimonio de Juan III de Albret con Catalina de Foix, reina de Navarra.
Este nuevo territorio y diversas posesiones (Bearne, Foix, Bigorra, Tartas, Castres, Dreux, etc.), les da un verdadero rol político en el siglo del Renacimiento. En 1556, el rey de Francia, Enrique II, erige el Albret como ducado par de Francia a favor del rey consorte de Navarra, Antonio de Borbón y de su esposa Juana de Albret, reina de Navarra. En 1589, que su descendiente más ilustre, Enrique de Navarra, cuya madre es Juana de Albret, accede al trono de Francia.[2]
No obstante, los Albret no habrían sabido mantenerse mucho tiempo en la cumbre de la sociedad de órdenes. No llegan a conservar intacto su reino de Navarra que fue invadido. Solo mantienen la parte más pequeña situada en el lado francés del Pirineo (Baja-Navarra) y Juana de Albret es la última de su nombre a subir sobre el trono.
Los Albret suben sobre el trono de Navarra durante tres generaciones y en la cuarta generación será el hijo de Juana de Albret quien suba al trono de Francia y de Navarra.
Juan III y Catalina de Navarra mueren prematuramente. Sus hijo, Enrique II, está elevado a la corte de Francia, estableciendo una amistad de infancia con Francisco I. La hermana de este último, Margarita de Angulema, se en éprend y la esposa. Su hija Juana de Albret se une a Antonio de Borbón, descendiente de los hijos de San Luis. De este matrimonio nace Enrique, futuro rey Enrique IV de Francia y de Navarra, que resulta en 1572, gracias a su matrimonio con Margarita de Valois, cuñado del últimosValois, Carlos IX y Enrique III, que mueren sin herederos. Su estatus de primogénito de los capetos le permite obtener el trono de Francia a la muerte de estos últimos.
Los descendientes notables incluyen a los reyes de Navarra (región vasca), políticos franco-mexicanos, Gerardo Ruiz de Esparza y Luis Rubén Jr. (née Valadéz) del matrimonio de Carlos Beaumont de Navarra, conde de Beaumont-Le-Roger y Ana de Curton d'Albret, dama de Curton y Guiche.[3]