El caldo de queso es un platillo tradicional originario de Hermosillo, Sonora.[1]
El caldo se hace con leche, agua hirviendo, papa, cebolla, jitomate, chile verde y orégano . También se le puede agregar, puré de tomate o caldo de pollo como condimentos.
El queso se agrega hasta el final, una vez que los demás ingredientes están cocidos, para evitar que este se gratine . Se suele preparar con cubitos de queso fresco o queso cotija; el contacto con el caldo hirviendo calienta el queso y le da una textura gomosa y masticable; a su vez se derrite ligeramente, dándole al caldo su sabor característico.
Al caldo de queso generalmente se le añade chiltepín o totopos.