Los Bienes nacionales protegidos son una categoría de áreas silvestres protegidas de Chile en la que están contenidos los bienes que estatales bajo tuición del Ministerio de Bienes Nacionales y que son considerados bienes del patrimonio natural y cultural dignos de proteger para el uso y goce de las generaciones actuales y futuras. Entre ellos se cuentan ecosistemas del desierto costero, desierto interior, bosque templado lluvioso, fiordos y archipiélagos, estepa costera, bosque y matorral esclerófilo y estepas altoandinas, humedales costeros y de altura, hábitats de especies amenazadas, oasis de niebla, cielos privilegiados para la observación astronómica, relictos de bosques nativos, grandes masas de selva húmeda, cajones cordilleranos, islas, orillas de ríos, lagos y cuerpos glaciares.
Se considera también que tienen un valor por las oportunidades que ofrece al país su desarrollo de corto y largo plazo en materia de turismo, ciencia, educación, protección y otros. Esta es una oportunidad para crear un instrumento de protección consistente en la auto destinación y posterior concesión a terceros para proyectos con fines de conservación y desarrollo sustentable, es decir para efectos del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.
En su portal, el ministerio de Bienes Nacionales escribe:[1]