Una barrera New Jersey (en inglés Jersey barrier) es una barrera de seguridad, generalmente en hormigón, utilizada como separador de flujos de tráfico, como protección en instalaciones militares o para delimitar provisionalmente zonas en obras.
Aunque existen algunas ligeras variantes en su diseño original, una barrera New Jersey estándar es una estructura rígida prefabricada de una o dos caras, construida de concreto armado. Posee un ancho mínimo en su punta de 0.15 mts y un peso aproximado de 1,700 kgs. Su longitud es de 275 cm, su anchura es de 63 cm y su altura es de 80 cm.
Tiene como principales ventajas una elevada resistencia al choque y la ocupación de un espacio muy pequeño. Existen igualmente barreras New Jersey móviles en material plástico, de color blanco o rojo, rellenables con agua o arena.
Estas barreras se instalaron por primera vez en la década de 1950 en la región de Nueva Jersey en los Estados Unidos,[1] para dividir múltiples vías de una autopista, y de ahí proviene su nombre.
Se incorporaron en España sobre el año 2001 para la protección en autovías y autopistas, estas son de hormigón armado macizo, con unas características de evacuación de agua de la calzada y anclaje al suelo. A partir de 2020, coincidiendo con la epidemia por SARS-CoV2, son utilizados en la ciudad de Barcelona (España) para proteger las terrazas de bares y restaurantes ampliadas a la calzada durante la pandemia.