Un aterrizaje suave es cualquier tipo de aterrizaje de una aeronave, cohete o nave espacial que no provoque daños significativos ni la destrucción del vehículo o su carga útil, a diferencia del aterrizaje «forzoso». La velocidad vertical media en un aterrizaje suave debe ser de unos 2 metros (6,6 pies) por segundo o menos.[1]
Se puede conseguir un aterrizaje suave de las siguientes maneras:
La variante en inglés de la locución, soft landing, se ha extrapolado a otras disciplinas como la economía, para hacer alusión a una desaceleración controlada de la inflación.[7][8]