Aegiphila panamensis es una especie de plantas con flores perteneciente a la familia Lamiaceae. Se encuentran en Belice, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá.
Aegiphila panamensis | ||
---|---|---|
Estado de conservación | ||
![]() Vulnerable (UICN)[1] | ||
Taxonomía | ||
Superreino: | Eukaryota | |
Reino: | Plantae | |
División: | Magnoliophyta | |
Clase: | Magnoliopsida | |
Orden: | Lamiales | |
Familia: | Lamiaceae | |
Género: | Aegiphila | |
Especie: |
Aegiphila panamensis Moldenke | |
Son arbustos, árboles o bejucos, con un tamaño de 1–10 m de alto; ramitas subteretes a cuadrangulares, algo aplanadas y canaliculadas adaxialmente, 2–8 mm de ancho, menudamente puberulentas con tricomas cortos curvados hacia arriba o glabras. Hojas elípticas, oblongas u oblanceoladas, 7–25 cm de largo y 3.5–10 cm de ancho, ápice acuminado o cortamente cuspidado, base cuneada o aguda, frecuentemente conduplicada o a veces obtusa, glabras o menudamente puberulentas con tricomas cortos curvados hacia arriba, cartáceas o membranáceas; pecíolo menudamente puberulento con tricomas cortos curvados hacia arriba o glabro. Inflorescencia panículas de cimas, terminal o terminal y axilar, la terminal 5–17 cm de largo y 2.5–10.5 cm de ancho, cimas con numerosas flores laxamente arregladas, pedúnculo 2–7.5 cm de largo, pedúnculo, pedicelo y cáliz glabros o puberulentos con tricomas cortos curvados hacia arriba, pedicelo 1–4 mm de largo; cáliz 2–4 mm de largo y de ancho, ápice truncado; corola con tubo 4–7 mm de largo, lobos 2–4 mm de largo. Fruto oblongo o globoso, 7–12 mm de largo y 7–10 mm de ancho, ápice deprimido, glabro; cáliz fructífero cupuliforme, 2–6 mm de largo y 6–10 mm de ancho, ápice entero, ligera a profundamente rasgado, glabro a ligeramente puberulento.[2]
Crece silvestre pero la especie no es abundante y se desarrolla en tierras bajas de selvas lluviosas, a menudo en terrenos pantanosos. Está tratada en peligro de extinción por pérdida de hábitat.
Aegiphila panamensis fue descrita por Harold Norman Moldenke y publicado en Tropical Woods 25: 14–16. 1931.[2]